“Soy trabajador rural, hago de todo. Trabajo con vacas, con caballos, en cosas del campo. Me gusta lo rural, es lo que sé hacer desde chico, pero es muy sacrificado.

      Salgo en la moto por el barrio a vender leche y hay algunos clientes que vienen por la granja. También vendo huevos o cuando sale agarro los caballos y hago fletes.

     Hay que remarla. Es complicado, vos vas con mil pesos al almacén y no te da para nada, comprás algo de comer o lo que necesiten los gurises para la escuela.

     Estaba haciendo ladrillos con un compañero y con la lluvia se perdió la producción, unos cuatro mil ladrillos. Además, se perdieron todas las herramientas. Te baja un poco el ánimo porque los ladrillos ya estaban para quemar. Hay que remarla, no queda otra".

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